Close

“LA PAZ DE DIOS”

“Señor, por tales cosas viven los hombres, y también mi espíritu encuentra vida en ellas. Tú me devolviste la salud y me diste vida. Sin duda, fue para mi bien pasar por tal angustia. Con tu amor me guardaste de la fosa destructora, y le diste la espalda a mis pecados”
(Isaias 38:16-17)

La cultura del desarrollo personal, así como la psicología del bienestar, están muy presentes en nuestra sociedad occidental. Se argumenta que sería necesario deshacerse de los sentimientos de vergüenza y culpabilidad que impiden estar bien consigo mismo. Los psicólogos nos invitan a sacar todo a luz y a interpretar qué hay detrás de las manifestaciones de malestar, para que cesen esas guerras internas.

De hecho, para poder hacer las paces con uno mismo, primeramente hay que hacer las paces con DIOS. Es cierto que puede haber sentimientos de culpabilidad que no están justificados; pero con respecto a DIOS existe una culpabilidad real, que permanece.

Desde la entrada del pecado en el mundo, el hombre está en conflicto con el DIOS SANTO, quien es muy limpio de ojos para ver el mal (Habacuc 1:13).
La Biblia dice cómo acercarse a ese DIOS SANTO. Es necesario reconocerse pecador ante Él y aceptar a JESUCRISTO, su Hijo, como Salvador.

Mediante su muerte en la cruz, JESÚS estableció una relación directa entre DIOS y los hombres.
Tener “Paz para con DIOS” es tener una relación de confianza con Él, sabiendo con seguridad que somos perdonados. Y esta convicción da paz a nuestra alma.

“Él vino y proclamó paz a ustedes que estaban lejos y paz a los que estaban cerca”
(Efesios 2:17)

Amado REY, sabemos claramente que no encontraremos la paz interior escarbando en nosotros mismos o creyendo en la sabiduría humana. El único que salva eres tu, hermoso SEÑOR. En el nombre de JESÚS. Amén y Amén.